RPG de Capcom de mundo abierto de hace unos años, esta vez llegando con su edición mejorada Dark Arisen a Steam; a parte de algunas mejoras de rendimiento y gráficas, esto nos trae la entrañable y peligrosa Bitterblack Isle al juego original, ampliando el lore del juego y multiplicando la dificultad en dicha zona hasta niveles insospechados.

Después de un prólogo bastante particular que nos ayudará a desentrañar muchas incógnitas a nivel del lore, procederemos a iniciar nuestra aventura encarnando a nuestro personaje (el cual crearemos a nuestro antojo) en el tranquilo pueblo costero de Cassardis (ubicado en el Reino de Gransys). Nos veremos envueltos en un terrible ataque del Gran Dragón y para nuestra desgracia seremos marcados por él, convirtiéndonos en un Arisen atado al destino y vida del mencionado Gran Dragón. Nuestra meta final será localizar y vencer al monstruo; sin embargo, hay muchas incógnitas a resolver en nuestro camino hasta llegar a él...

Como hemos indicado anteriormente, nuestro Arisen lo crearemos como queramos eligiendo sexo, raza, clase, y pudiendo editarlo a nivel físico como precisemos. Una vez hecho esto podremos iniciar nuestro viaje, no sin antes conocer la existencia de los Peones, los cuales son criaturas de aspecto similar a los humanos que existen para servir al Arisen y que nos ayudarán a cumplir nuestro destino.
Básicamente, son NPCs que pueden ir contigo en una party máxima de 4. En cierto punto de la historia, se nos pedirá crear nuestro propio Peón al igual que hicimos con nuestro Arisen, mientras que los otros dos huecos serán ocupados (si lo deseamos) por Peones creados por otros jugadores (si jugamos en modo Online) o los predefinidos que nos vaya ofreciendo el juego (si es modo Offline). La IA de los Peones no es mala, pero tampoco es que sea nada del otro mundo.

El combate/juego se desarrolla en tercera persona, pudiendo dar órdenes básicas a tus Peones de manera opcional (avanzar, asistir, volver, y poco más). Si no se les da orden alguna, los Peones se comportarán según el carácter que tengan definido (por ejemplo, si su rasgo es Feroz serán ultra agresivos en combate, priorizando matar a los enemigos en lugar de asistir a los aliados). Podremos equipar tanto a nuestro Arisen como a nuestro Peón principal una serie de habilidades de la clase que posean en ese momento para hacerlos más versátiles y podamos adaptarnos mejor a la situación que vayamos a enfrentarnos. Podemos también combinar habilidades con nuestros aliados para devastar a nuestros enemigos o causarles algún tipo de debuff. Hay varios tipos de armas físicas (espadas, dagas, arcos, mazas, etc.), mágicas (bastones, archibastones), y mixtas (espadas mágicas, arcos mágicos, etc.) los cuales tendremos disponibles en función de nuestra clase. Las armas y armaduras podremos mejorarlos en tiendas utilizando ciertos materiales. Según vayamos usando las habilidades de dicha clase conseguiremos puntos de clase que nos permitirán adquirir habilidades nuevas y ser más mortíferos en batalla o más versátiles en ciudades/pueblos (investigar, negociar, etc.).

El control está bastante bien ajustado, teniendo buenas hitboxes y siendo dinámico y entretenido. De hecho, los monstruos grandes (como un Grifo o una Quimera) suelen tener un componente estilo Monster Hunter en el cual puedes dañar una parte para evitar que te puedan dormir, que se curen, un ataque específico concreto, etc.; me ha gustado el detalle que te puedes subir a ellos también para favorecer dicha situación si quieres intentar dañar una parte concreta; naturalmente los monstruos harán lo posible para quitarte de encima cuanto antes.

Como en los Dark Souls, aquí hay daño por caída. No suele ser tan limitante como en dicha saga, pero es importante tenerlo en cuenta a la hora de explorar ciertas partes del mapa de Gransys. Casi todos los enemigos/items hacen respawn en el juego excepto algunos encuentros muy concretos a nivel de historia.

El mundo está bastante lleno de vida; encontraremos ciervos, conejos, y demás fauna y flora según el tipo de zona en el que nos hallemos (amén de los enemigos típicos del lugar). Las ciudades y pueblos también lo están, puesto que hay MUCHOS NPCs con los que interactuar (aunque sean muchos de conversaciones básicas). Un detalle que me ha hecho gracia es que TODOS los NPCs del juego tienen nombre, y casi todos pueden recibir regalos por tu parte para subir su aprecio por ti (pueden darnos información nueva, ser más amables, ofrecernos descuentos si son tenderos, etc.)

El apartado sonoro es muy bueno tanto a nivel de melodías como de efectos. A resaltar el tema "Coils of Light" que es maravilloso.

El juego tiene varios puntos flojos:
- El doblaje de las voces en inglés es bastante lamentable; muchas voces están sobreactuadas, excepto algunas pocas de algunos NPCs (Ser Mercedes o Edmun Dragonsbane).
- La historia no está muy bien contada, y salvo que leas el diario que va llenándose automáticamente según avances en ella, es difícil comprender qué está sucediendo. El lore del mundo es bastante rico y lleno de matices, pero está por trabajar porque no está bien explotado.

Y finalmente tenemos la crema de la edición Dark Arisen, que es Bitterblack Isle. Es una zona totalmente nueva aparte de Gransys al cual nos veremos transportados si hablamos con un misteriosa chica llamada Olra por la noche en Cassardis. El propio juego te recomienda que vayas habiendo pasado al menos una vez el juego (puedes continuar con todo lo que tenías anteriormente al igual que en los Dark Souls), puesto que la dificultad es muy elevada y te vas a ir al hoyo más pronto que tarde.

Aquí tanto los enemigos como los NPCs son bastante épicos y entrañables, y añaden bastante explicación al mundo de los Arisen. Se trata de una historia bastante triste y desdichada, pero que creo que suple gran parte de los problemas narrativos de los que adolece el juego.

La OST mejora aún más hasta límites insospechados, pasando a veces por un juego de TERROR más que RPG. La ambientación de la isla es sublime, llegando a pasando mal por tanto ambiente opresor.

En general, un 10 a los bosses finales del juego, tanto a nivel de ambientación como de lore. El boss final de Bitterblack Isle es dificilísimo, pero te deja una gran sensación al vencerlo tanto a nivel de lore como de recompensas. Espectacular.

En definitiva, un gran juego que pasó bastante desapercibido en su momento ya que coincidió con el Skyrim. Hora de jugarlo YA puesto que con todos sus fallos merece realmente la pena.